Documento de Devenir Diverse acerca del Sínodo Extraordinario sobre la Familia de la Iglesia Católica
Teniendo en cuenta las repercusiones mediáticas del contenido del documento preliminar del Sínodo Extraordinario de obispos sobre la Familia, y el contenido y la forma del debate nos vemos en la necesidad de aportar nuestra perspectiva.
En primer lugar es necesario aclarar sobre los hechos concretos, que el documento dado a conocer era documento de trabajo y que finalmente no se vio reflejado en el documento final, por lo cual, las supuestas reformas no fueron efectuadas. Y que además de esto, los documentos de sínodos de obispos revisten apenas un carácter consultivo.
En cuanto al contenido del documento, no significaba un cambio de paradigma ni mucho menos, sino simplemente un pedido de un trato no discriminatorio hacia los hombres y mujeres con “tendencias homosexuales” pero nada dice del reconocimiento de nuestras familias o uniones como tales.
Creemos que estas maniobras son simplemente operaciones mediáticas, que encuentran amplia repercusión entre los medios internacionales y nacionales, y tienen por único objetivo enmascarar la verdadera política que lleva a cabo la jerarquía vaticana contra la comunidad LGBTIQ en su conjunto.
Consideramos que un verdadero cambio de paradigma en la relación con la comunidad LGBTIQ es el inmediato cese de las hostilidades de la jerarquía de la Iglesia Católica Apostólica Romana hacia nuestra comunidad. En cuanto a este punto es necesario recordar que son prelados católicos quienes apoyaron y dieron sustento ideológico y conspiraron para efectivizar la legislación de la pena capital a homosexuales en países como Uganda, que también fueron y son obispos católicos quienes apoyan las leyes que criminalizan la homosexualidad y cualquier expresión de diversidad en Rusia y otros países con legislaciones restrictivas, que son obispos católicos quienes sistemáticamente se oponen a cualquier legislación en materia de derechos civiles para la comunidad LGBTIQ, como fue el caso del Matrimonio igualitario en Argentina, incluso movilizando a la feligresía, generando lobbies en las cámaras de representares y utilizando medios extorsivos cuando lo creían necesario, por ultimo también son obispos y sacerdotes católicos quienes miran con indiferencia los hechos de violencia registrados a lo largo y ancho del mundo hacia nuestra comunidad, con el agravante de que en muchas ocasiones estos hechos se registran en nombre de esta misma religión e incluso del mismo Papa Francisco.
Cabe recordar que son innumerables los documentos de la iglesia que condenan a las prácticas homosexuales, o en el mejor de los casos se refieren todavía a la homosexualidad como una enfermedad, ignorando la opinión de las asociaciones de expertos e incluso la OMS sobre el tema. Entre estos documentos encontramos el propio catecismo y encíclicas recientes, tanto de Juan Pablo II, como de Benedicto XVI, por tanto una simple recomendación en el trato no va a borrar tantos años de exclusión.
En cuanto al hoy Papa Francisco, no olvidamos que fue El mismo quien en ejercicio de la Presidencia de la conferencia episcopal Argentina, encabezó la oposición a la ley de matrimonio igualitario, incluso llamando a una “guerra santa” y poniendo en consecuencia en pie de guerra a muchos feligreses católicos de nuestro país, generando un clima bélico en un debate publico que la sociedad debía darse con responsabilidad y respeto y lejos de esos ánimos. En lo reciente, también fue el Papa Francisco quien insto a los representantes diplomáticos de la República de Francia a legislar a favor de la familia (Papá, mama e hijos) incluso derogando leyes existentes, en clara alusión al proyecto de unión civil que se debatía en ese momento.
Es preciso aclarar que a muchas y muchos de nosotrxs no nos interesa formar parte de esta institución y nos tienen sin cuidado las reformas que puedan implementarse al interior de la misma, en doctrinas que nos son completamente ajenas y rechazamos cualquier reconocimiento o valoración parcial de nuestra dignidad humana, y con particularidad si ese recorte viene de una institución que sistemáticamente nos ha hostigado violentamente.
No tenemos que dar cuenta de ninguna lista de dones para ser respetados. La personas trans, lesbianas, gays, bisexuales e intersexuales somos sujetos plenos de derechos y no necesitamos de la compasión de ninguna religión. Insistimos en cambio, y enfáticamente, en la necesidad de efectivizar estados laicos, en donde las legislaciones contemplen los proyectos de vida que cada ciudadano elija vivir, en respeto de la diversidad de toda la población, sin perjuicio de la religión que practique, de su identidad de género, su color de piel, su clase social o sus prácticas sexo- afectivas.
Creemos que estas expresiones gatopardistas reflejan la hipocresía de esta iglesia que se dice “humilde” y conserva los privilegios económicos obtenidos en tiempo de gobiernos de factos y dictatoriales a cambio de silenciar y bendecir crímenes, que se dice “transparente” y oculta los violaciones que comenten sus miembros. Que se dice “inclusiva” y promueve el odio y al segregación. Consideramos que estas actitudes no contribuyen en nada al respeto y la valoración de la diversidad, sino por el contrario engañan y desvían los verdaderos debates.
Todo lo dicho anteriormente en nada interfiere en nuestra relación con los fieles cristianos o aquellas personas que practican otros credos y con quienes compartimos instancias de dialogo, relaciones institucionales, proyectos de vida y lo hacemos en el marco del respeto que cada uno de nosotros nos merecemos. Con quienes seguiremos debatiendo, compartiendo y celebrando nuestras diferencias en pos de una convivencia armónica y enriquecedora.
Para continuar este debate y como lo venimos haciendo hace ya varios años, en el marco del mes de la Diversidad, Devenir Diverse invita a la "Charla-debate: Diversidad sexual, laicidad estatal y religiones": Miércoles 22 de octubre a las 19 hs. en el Microcine del Subsuelo de Radio Nacional (Av. General Paz y Santa Rosa) con entrada libre y gratuita.
Para más información: 3513 871653 / 3547463048
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